La elaboración de un presupuesto es una de las principales herramientas que las personas poseen como un mecanismo de control y seguimiento a sus ingresos y egresos.

Paradójicamente, siendo uno de los mecanismos más efectivos para llevar este tipo de control, son muchas las personas que omiten o no le dan la importancia que merece a este sistema de planificación financiera.

Por lo anterior, si consideras que eres una de estas personas, te invitamos a que continúes leyendo el artículo debido a que en él te brindaremos una serie de recomendaciones que deberías seguir para iniciar un presupuesto adecuado y enfocado a tu realidad financiera.

¿Para qué sirve un presupuesto?

Un presupuesto no solo sirve para controlar ingresos y egresos, y si te preguntas para qué más podría resultar útil, puedes leer la respuesta a continuación.

Tu presupuesto te servirá mucho para proyectarte a futuro en materia de contracción de deudas u obligaciones financieras a las cuales te puedas hacer acreedor en determinadas circunstancias.

Desde el pago de tu universidad, tus estudios de postgrado, la compra de la casa de tus sueños, adquirir un vehículo o viajar, son algunos de los motivos más frecuentes entre quienes solicitan préstamos rápidos y seguros para solventar sus necesidades.

Por esta razón, subestimar la influencia que implica llevar en orden un presupuesto acertado y actualizado puede traer consigo un impacto negativo a la salud de tus finanzas personales.

Algunas de las causas más comunes por las cuales no se realiza un presupuesto con anterioridad son el desconocimiento, la falta de atención al manejo financiero y crediticio adecuado y la creencia de que el dinero siempre se conseguirá sin importar las adversidades.

Tu presupuesto además de enfocarte a futuro, financieramente hablando, también se tornará en una herramienta de diagnóstico que te dirá, si lo llevas con constancia y disciplina, cómo estarán tus finanzas más adelante y te ayudará a tomar buenas decisiones.

… Y para emprendedores…

Por otra parte, si eres emprendedor, será tu mejor aliado para iniciar tus emprendimientos con “pie derecho” y emplear tus recursos de la mejor forma posible de cara a tu idea de negocio.

En cuanto al manejo de las finanzas personales, otro de los factores que más recalcamos como importante es el tener un historial de crédito impecable, debido a que quien conoce lo que tiene sabe hasta dónde y cómo gasta.

Generalmente las personas que saben llevar de manera óptima un presupuesto, suelen ser aquellas personas que poseen un historial de crédito sin tacha alguna y por ello suelen tener más probabilidades de cumplir sus metas sin importar los plazos.

En este punto del artículo te estarás preguntando cómo elaborar un presupuesto definitivo, y para ello te contaremos cómo puedes hacerlo y recomendarte que incluir en él.

Cómo elaborar un presupuesto definitivo

Para lograr este propósito, puedes optar por realizar este presupuesto de la manera más tradicional posible, y sí, se trata ni más ni menos que de emplear una de las herramientas que consideramos como el mejor aliado para llevar una vida financiera saludable: ¡Excel!

Podrás encontrar un sin número de plantillas y formatos que te facilitaran mucho esta tarea, solo basta con realizar búsquedas en internet o disponer de una conexión estable y hacer uso de Google Docs como una herramienta alternativa al Excel tradicional de Microsoft.

Si lo que buscas es fácil acceso y llevar tu presupuesto siempre contigo, puedes optar por descargar una de los cientos de aplicaciones existentes para dispositivos móviles que también suelen volver este proceso una tarea mucho más sencilla, didáctica e intuitiva.

A nivel tecnológico las posibilidades para organizar las finanzas se encuentran al alcance de todos, y si algo no comprendes te recomendamos buscar asesoría o instruirte mediante tutoriales online o video tutoriales que se encuentran disponibles en la plataforma de Youtube.

Pasando a lo que debería contener tu presupuesto, es importante que te enfoques en incluir los siguientes datos que consisten en los aspectos más relevantes de un presupuesto bien estructurado.

• Tus ingresos y egresos (gastos)
• Una proyección de tus gastos fijos mes a mes
• Un estimado del monto que requieres para cumplir con tus obligaciones financieras
• Una relación de tus ganancias o ingresos ocasionales
• Un estimado de cuánto dinero tienes ahorrado y de cuánto esperas ahorrar

En la sección de egresos te recomendamos incluir rubros como servicios públicos, gastos en combustible y transporte, gastos de alimentación, alquiler si actualmente vives en un inmueble que no es de tu propiedad y gastos que puedan surgir en tu cotidianidad y que sean recurrentes.

En cuanto a la proyección de tus gastos fijos mes a mes, recomendamos incluir este aspecto debido a que los gastos son propensos a variar en su cuantía dependiendo de las circunstancias y no siempre serán los mismos, más aún si planeas endeudarte.

El monto destinado para cubrir tus obligaciones financieras debe estar acorde con la cifra de tus ingresos fijos. Generalmente no debes adquirir deudas que superen el 30 o 35% de lo que devengas mensualmente.

La relación de tus ganancias o ingresos ocasionales es recomendable incluirla, debido a que esta captación de capital intempestivo puede ayudarte a solventar tus deudas o cubrir gastos sin necesidad de acudir a un préstamo que te haga acreedor de una obligación financiera.

Por último, te recomendamos incluir un apartado dedicado al rubro del ahorro, aquí deberás establecer una cifra basada en tus ingresos fijos mes a mes y destinar alrededor de un 10 a 15% como mínimo de esa cifra mensual.

La cultura del ahorro te mantendrá preparado para afrontar situaciones intempestivas que tengan impacto en tus finanzas personales.

Y recuerda: lo que no se mide, ¡no se controla!