En la era digital, el sueño de muchos emprendedores es comenzar su primera Startup o empresa emergente. Esta idea apasiona a muchos emprendedores alrededor del mundo, quienes están buscando ingresar al mundo empresarial. No obstante, cuando un emprendedor desea desarrollar su idea, el primer obstáculo es no saber cómo financiarla.

Muchos de ellos cuentan con ideas fantásticas y planes de negocio muy elaborados. Sin embargo, pierden su motivación a la hora de hablar de dinero. La realidad es que la mayoría de jóvenes no poseen ese dinero y por lo tanto deben pedirlo. Pero pedirlo en préstamo implica tener una deuda y pagar intereses, sin probar si el modelo funciona o no.

Si tú eres un emprendedor que está buscando materializar su sueño, la buena noticia es que tienes muchas opciones. Opciones que pueden ser no muy conocidas por ti, pero lo suficientemente amplias para que puedas escoger entre ellas. Principalmente, existen dos grupos: las opciones de financiamiento tradicional y las opciones de prestamistas no bancarios

A continuación, hay una lista de algunas opciones que puedes escoger para comenzar tu empresa. Incluso las puedes utilizar si ya tienes una Startup sólida y necesitas capital.  Asegúrate de escoger la que más te convenga y te ayude a construir tu sueño:

Líneas de crédito tradicionales

Son las maneras más conocidas para pedir un préstamo, por medio de entidades bancarias o estatales. El funcionamiento de ellas es bastante similar e incluso las tasas de interés son competitivas entre sí.

Préstamo Bancario

Como todos sabemos los bancos son entidades prestamistas de dinero. Dentro de la estructura de estos, algunos prestamos son más “baratos” que otros, según la modalidad. En el caso de préstamos para Crear Empresa o Micro prestamos, existen tarifas generalmente un poco más económicas. Esto debido a las regulaciones de banco central, que benefician la creación de empleo, por medio de nuevas empresas.

Las desventajas:

En ocasiones puede parecer que se requiere de mucha documentación para acceder al préstamo. También, los tiempos espera para la de aprobación puede ser extensos. Otra desventaja es que no todos los bancos ofrecen el “beneficio” de tarifas para financiar un negocio nuevo.

Entidades gubernamentales exclusivas para el desarrollo de negocios

En algunos países, el estado designa a una entidad gubernamental que ayude al crecimiento de las empresas en el país. Estas entidades prestan dinero a las empresas emergentes y el proceso es muy parecido al de los bancos. Pueden tener incluso intereses más bajos que los que ofrecen los bancos.

Prestamistas no bancarios

Esta modalidad, que es relativamente nueva, está teniendo mucha fuerza en el campo de los negocios. Como consecuencia, cada vez hay más prestamistas o inversionistas independientes, dispuestos a ayudar a crecer una empresa. Por otro lado, existen modalidades diferentes como las campañas en internet de recaudación de fondos o las becas y/o concursos.

Inversionistas independientes

Son personas naturales que cuentan con un capital extra para invertir. Estas personas están buscando negocios que les llamen la atención y en los cuales puedan encontrar una rentabilidad. El prestamista puede poner solo su dinero o puede ayudarte con su experiencia profesional a crear o consolidar tu Startup.

Hoy en día, existen muchos inversionistas dedicados tiempo completo a ayudar a las empresas emergentes. Adicionalmente, muchos de ellos están especializados en diferentes industrias, lo que supone una ayuda a la hora de hacer crecer el negocio. Podrás trabajar con personas expertas, que te ayuden a crecer personal y profesionalmente tu negocio. Incluso pueden tener grandes influencias en tu nicho.

Las desventajas:

El inversionista a cambio de su inversión va a pedir un porcentaje sobre valor del negocio. Este porcentaje puede variar, según el tamaño de la inversión. En ocasiones cuando este sujeto financia la mayoría de la empresa, puede pedir porcentajes del 50% sobre esta.

Páginas web de recaudo de dinero

Este método no es tan común, pero es muy beneficioso, ya que puedes llegar a conseguir más dinero del que necesitas. Consiste entonces en varias páginas web que prestan sus servicios para publicar productos o servicios emergentes. Por medio de una captación de recursos, están paginas ayudan a impulsar negocios y renuncian a su propiedad intelectual.

Para utilizar este servicio debes inscribirte y leer muy bien los “términos y condiciones”. Así mismo, debes cumplir con el reglamento. El paso siguiente es fijar el monto mínimo que necesitas para tu empresa y una fecha límite para recaudarlo.

Es también conocido como “financiación en masa”, ya que, cualquier persona puede darte dinero por medio de la página web. Generalmente, se usan métodos de pago asegurados como por medio de Amazon.

Las desventajas:

Para poder ingresar a estas plataformas necesitas cumplir con unos requisitos específicos que asigna la página. Además, las empresas dedicadas a proyectos de caridad están excluidas de servicio, en páginas como KickStarter. Esta página, por ejemplo, se quedan con el 5% del dinero recolectado. No olvides leer con atención las letras menores, en caso de no llegar a recaudar el monto mínimo en la fecha propuesta.

Becas y concursos

Es un método muy antiguo y a veces no muy explorado. No obstante, es el mejor a la hora de hablar de financiamiento. De hecho, a través de las becas o concursos se le da el dinero al ganador a cambio de ningún tipo de interés o porcentaje de la empresa. Por esto, vale la pena intentar participar en los que estén disponibles en tu ciudad.

Este método es también una manera excelente de hacer conocer tu marca nacionalmente. Así que, si estas interesado/a puedes buscar esta financiación ingresando a las paginas estatales de tu ciudad o país y ver que te pueden ofrecer.

Las desventajas:

Son plazas limitadas para 1 o máximo 3 ganadores. La mayoría de ellas están dispuestas para financiar proyectos ya existentes y con un recorrido en el mercado. Además, existen fechas de cierre de inscripción específicas y si no tienes todo organizado para ese momento, tendrás que participar la próxima vez.