Hace algún tiempo que decidiste lanzarte a la aventura que representa iniciar un negocio propio.

Ciertamente, esa decisión influyó en tus finanzas personales, tuviste que dejar tu empleo, echar mano a parte de tus ahorros y acudir a financiamiento externo, asumiendo todos los riesgos que la decisión representaba.

Al principio fue bastante complicado, pero puede decirse que poco a poco te has ido abriendo espacio en el mercado y ya tienes cierta estabilidad.

A pesar que los números han pasado de rojos a negros, aún no consigues utilidad, por lo que sigues cubriendo tus gastos personales desde tu cuenta de ahorros.

La idea de un negocio rentable que te permita vivir tranquilamente sigue dando vueltas en tu cabeza pero, a pesar de tu esfuerzo, no termina de materializarse.

Si este es tu caso, necesitas darle un nuevo impulso a lo que comenzó como un sueño. Por eso, te presentamos algunas recomendaciones para mejorar los resultados financieros de tu negocio y, con ellos, los de tu bolsillo.

Revisar tu plan de negocios

Muchas veces transcurrido un tiempo tomamos unas viejas notas y nos sirven para refrescar ideas que se nos ocurrieron en el pasado.

Lo mismo ocurre con el plan de negocios. Una vez transcurridos varios meses desde el inicio de tu emprendimiento, es muy importante que revises el plan con el que nació el proyecto.

De esta manera podrás identificar si hay desviaciones y recordar diferentes aspectos de tu visión inicial sobre el negocio.

Una vez identificadas las diferencias, deberás evaluar si es una buena idea encauzar los procesos según el plan inicial o si puede mantenerse como se está realizando.

Ampliar la red de clientes

La mejor manera que tienes para ampliar tu red de clientes sin impactar demasiado tu bolsillo es valerte de los consumidores actuales.

Además de continuar tratándolos muy bien y ofrecerles un producto de excelente calidad que te garantice los comentarios de boca en boca, puedes incluir información de tu negocio y productos en los empaques.

 Esto garantizará que el mismo cliente servirá de distribuidor de toda la información que consideres necesaria.

Intenta acercarte más al consumidor final, escucha sus inquietudes y propuestas, así podrás detectar de forma temprana la necesidad de algún cambio de estrategia.

Es recomendable asistir a ferias y exposiciones que permitan el intercambio de información con otros emprendedores y la interacción con potenciales clientes.

Un punto relevante es que, a pesar de estar en busca de crecimiento, debes mantener  tus clientes actuales, nunca descuidarlos.

Utilizar las redes sociales

Sin duda las redes sociales están marcando la pauta en cuanto a la mejor manera de darse a conocer. Con un simple clic una persona al otro lado del mundo puede ver casi al instante cualquier información que publiques.

Comienza por familiarizarte con las redes sociales, investiga de qué se tratan y escoge una para iniciar. Si ya tienes alguna red social activa como cuenta personal, utilízala también para impulsar tu negocio.

Es muy importante que incluyas en tu presupuesto  la adquisición de un buen smartphone  que te permita estar en constante comunicación con tus clientes.

Puedes utilizar estas plataformas para conocer y entender mejor tu mercado. Interactúa con la comunidad y, lo más importante, acepta los retos y sugerencias.

De igual forma te recomendamos tener mucho cuidado con publicaciones que puedan influir negativamente en tu imagen, dado que el público que utiliza este tipo de herramientas tecnológicas suele ser muy exigente y los errores se propagan muy rápido.

Otra sugerencia es que inviertas en contratar personal calificado para que se encargue del manejo de las redes sociales de tu empresa.

Así garantizarás el cumplimiento de los objetivos de mercadeo a través de estas plataformas digitales, pues pondrás tus redes en manos expertas.

A medida que los números vayan mejorando gracias a las redes, podrás ampliar el equipo que se encargue de esto.

Invertir en publicidad

Si bien está muy ligado a los puntos anteriores, debe ser evaluado de forma individual y acorde a las necesidades de tu negocio.

Además de tener presencia en las redes sociales, es una muy buena (y económica) idea distribuir información de tus productos y servicios a través de aplicaciones de mensajería instantánea para smartphones.

Así mismo, puedes complementar la publicidad de tu negocio repartiendo volantes. Es una técnica de bajo costo que podrás financiar utilizando un préstamo de dinero en efectivo en 10 minutos y verás que los resultados serán maravillosos.

Si aún tu negocio no ha despegado del todo, no es recomendable hacer grandes gastos en publicidad en televisión, radio o revistas, pues suelen ser medios más costosos.

Nuevamente, la sugerencia es contratar con personas expertas en esta área para que te asesores bien y puedas hacer un óptimo uso de los recursos financieros.

Utilizar eventos y festividades

Existen ciertas épocas del año en las que las ventas crecen significativamente, por ejemplo Navidad, vacaciones, etc. Debes identificar esas fechas y prepararte previamente para cubrir las necesidades del mercado.

Lo mismo ocurre con grandes eventos, como ferias de la ciudad, conciertos y festivales, ante los cuales debes estar muy atento para participar y hacer muchas ventas.

Para poder lograrlo es recomendable que planifiques con anticipación la inversión que se requiere. Es decir, si te preparas para la época navideña, por lo menos dos meses antes debes prepararte para tener lo que se necesita para que puedas cubrir la demanda de tus clientes.

Mitigar riesgos

Probablemente al principio no se tenía contemplada la contratación de seguros para prevenir grandes pérdidas, con el negocio establecido es momento de contratar un proveedor de seguros.

Eso te brindará la seguridad de que contarás con el respaldo necesario ante cualquier imprevisto y no se pondrá en riesgo tu negocio ni tu inversión.

Contrastar con tus finanzas personales

La relación entre tu negocio y tus finanzas personales es evidente. A medida que el primero crece, tus finanzas personales verán mayores ingresos y, en consecuencia, estarás más solvente.

Sin embargo,  se debe mantener el control de los gastos personales. No porque tu negocio marche bien debes hacer gastos superfluos e innecesarios.

Lo recomendable es mantener un balance positivo entre ingresos y egresos, de esta manera tendrás siempre un lugar de dónde sacar dinero para hacer crecer tu negocio en un momento determinado.

Como has podido leer, resulta sencillo aplicar algunos pequeños ajustes  que permitan mejorar el desempeño de tu negocio sin que esto signifique una alta inversión. Todo es cuestión de tener una visión amplia de los procesos y poner manos a la obra.

Lo deseable es crecer en número de clientes, aumentar la ganancia por transacción y lograr mayor frecuencia de ventas, todo esto acompañado de unas finanzas personales sanas.